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5 pasos para cambiar tus malos hábitos de alimentación

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Un hábito es el resultado de una acción que por lo general, repites con frecuencia y de forma inconsciente. Con esta definición, notarás que ya estás haciendo muchos hábitos en tu día a día, tales como, apagar las luces antes de salir, lavarte las manos antes de comer, cepillarte los dientes, arreglarte para salir, entre muchos otros más.

Estas acciones ya las realizamos de forma automática, y por tanto, no requieren mucha atención ni esfuerzo de tu parte, pero si lo requerirás para realizar las actividades que aún no son hábitos. Como por ejemplo, cambiar tu forma de alimentarte o iniciar ejercicio, entre otros.


Pero, ¿Cómo podemos cambiar los malos hábitos que ya tenemos? Aquí te doy algunas estrategias que puedes aplicar para crear cambios. 


1. Modifica tus hábitos de uno en uno: Si te centras en cambiar tus hábitos de uno por uno, tienes muchas más posibilidades de tener éxito que si intentas cambiarlos todos a la vez. Concentra tu esfuerzo y verás resultados más fácilmente. Empieza con aquel hábito que crees te será más fácil de cambiar. Esto te motivará y podrás ir al siguiente. Si intentas cambiar varios hábitos a la vez, tal vez te abrumes y no consigas modificarlo. Recuerda que el secreto está en la repetición del mismo.


2. Planifica y modifica tu plan: Es esencial que tengas un plan escrito sobre los pasos que vas a seguir para cambiar tu hábito. Un plan te permite concretar exactamente cuáles son los pasos que vas a seguir para evitar tu antiguo hábito y empezar el nuevo. Planifica, pon tu plan en marcha y modifica todo aquello que no te esté funcionando bien.


3. No te rindas: Cuanto más antiguos sean tus hábitos, más difícil te será cambiarlos. Es importante que aunque no lo puedas realizar alguna vez y vuelvas a tus hábitos anteriores, no dejes de intentar los nuevos hábitos que estás creando. Es normal que tus hábitos sean difíciles de romper. ¡No te rindas! Si hoy no lo has podido conseguir hoy, mañana tienes otra oportunidad para intentarlo.


4. Mejora La Imagen De Ti Mismo: Aunque no lo creas, la imagen que se tenga de uno mismo, y los hábitos que hemos creado, se encuentran muy relacionados!,  por eso , al cambiar la imagen, es obvio que los hábitos también lo harán. Es importante que lo hagas desde el pensamiento primero, es decir, que pienses en positivo. Te puedes apoyar de cambios físicos también, como por ejemplo, un tinte de cabello diferente, o prendas de ropa que te hagan sentir muy bien contigo mismo. Crear una mejor imagen de ti mismo, duplicará las probabilidades de éxito para cambiar tus malos hábitos.

5. Piensa de forma positiva (Pero, de forma Realista): Los pensamientos tienen mucho poder en el inconsciente; y éste dirige la mayoría de nuestras acciones, por ejemplo, si piensas que no te irá bien en ese día, seguramente, todas tus acciones, irán en ese camino y al final del día sentirás que efectivamente, no te fue bien.  El secreto está en cambiar la perspectiva que se tiene de la acción a realizar. Como todo en la vida, no hay algo mágico, todo depende del esfuerzo y trabajo que le pongas a lo que deseas, en este caso, deberás esforzarte en cambiar los hábitos que no te gustan y verás que todo tu trabajo se verá reflejado en un bienestar. 


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